La igualdad de género es un derecho humano fundamental y un pilar para el desarrollo sostenible. Sin embargo, en muchos lugares del mundo, las mujeres siguen enfrentando barreras en el ámbito laboral, como la discriminación estructural y falta de representación en puestos de poder. Esta desigualdad limita el potencial individual, el crecimiento y la innovación de las organizaciones.
La norma INTE/ISO 53800:2024 ofrece una hoja de ruta para superar estas barreras, proporcionando directrices que incluyen recursos, políticas, herramientas y buenas prácticas. Estas medidas ayudan a las organizaciones al fomentar una cultura de equidad y empoderamiento, permitiendo que todas las personas desarrollen su máximo potencial y contribuyan al éxito colectivo.
La igualdad de género es un tema que trasciende géneros, es un tema de derechos humanos y un indicador fundamental del desarrollo sostenible basado en las personas. Incorporar este enfoque muestra un alto grado de responsabilidad social, lo que refuerza la agenda ambiental, social y de gobernanza (ASG) de cualquier organización. Al abordar este tema se genera un impacto positivo en el entorno ya que se promueve una cultura inclusiva donde se minimizan las brechas de género y se maximizan las oportunidades de desarrollo para todas las personas.
Beneficios
- Menor rotación del personal
- Reclutamiento de calidad
- Entorno laboral más sólido, productivo e innovador
- Mayor productividad
- Un liderazgo equitativo que aporta perspectivas diversas
- Mayor rentabilidad
La adopción de la norma INTE/ISO 53800 permite a las organizaciones integrar la igualdad de género de manera sistemática, alineando sus prácticas con objetivos globales de desarrollo sostenible. Este enfoque mejora su competitividad y fortalece su reputación como una organización socialmente responsable.
La igualdad de género representa un derecho fundamental, un desafío para la sociedad y un motor del éxito para las organizaciones. Gracias a la normalización, las organizaciones cuentan con herramientas concretas para impulsar este cambio.
¡Hagamos de la equidad de género una realidad!
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