El Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo busca promover la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en todo el mundo a través de la sensibilización hacia la magnitud de las lesiones, enfermedades y muertes relacionadas con el trabajo. Datos de las Naciones Unidas señalan que los accidentes laborales, el estrés, las largas horas de trabajos y las enfermedades relacionadas con el trabajo causan 374 millones de muertes al año y tienen grandes repercusiones tanto en el ámbito personal como en el familiar, no sólo desde un punto de vista económico, sino también con relación al bienestar físico y emocional a corto y a largo plazo.
En ese sentido, el Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (INTECO), en su rol de Ente Nacional de Normalización, genera normas técnicas, a través de los Comités Técnicos Nacionales (CTN), que ayudan a las empresas a poner la salud física y emocional de los colaboradores en el centro de la toma de decisiones, creando una cultura de prevención de seguridad y salud en el ámbito laboral.
“Los riesgos para la salud y la seguridad en el lugar de trabajo pueden ser abordados a través de lineamientos técnicos que ayuden a las empresas en el proceso de identificación, evaluación y control, mediante acciones que aseguren el bienestar integral de las personas trabajadoras; así como lograr un equilibrio entre la productividad laboral y la salud, generando que las empresas sean lugares seguros”
José Adrián Arroyo, gestor de proyectos en INTECO.
Las normas técnicas, desde la salud ocupacional y la higiene laboral, vienen a significar un aporte en la integralidad de la vigilancia de la salud de las personas trabajadoras, es decir, que las empresas puedan visualizar, a través de estas, cómo ir a trabajar puede representar situaciones que impactan la integridad física, la emocionalidad, el proceso cognitivo y la psicología de una persona.
En este sentido, los factores psicosociales juegan un papel fundamental en la seguridad y salud en el lugar de trabajo, ya que, cuando impactan de manera negativa pueden llegar a ser detonantes de enfermedades físicas y emocionales, generando altos costos a la salud pública.
Es por esto por lo que el comité técnico nacional de factores psicosociales de INTECO ha generado normativas para un abordaje correcto. La más reciente es la norma INTE T123:2023 Guía para la gestión del comportamiento suicida en los lugares de trabajo, la cual tiene como objetivo ofrecer información sobre el comportamiento suicida (ideación, intento y suicidio consumado) con una visión general de las estrategias de prevenciones del suicidio centradas en el lugar de trabajo, buenas prácticas y herramientas prácticas.
“La norma es una guía para las empresas, de carácter público y privado, para que puedan gestionar el comportamiento suicida de las personas que trabajan: cuáles factores son los que deben atender en ese comportamiento, qué pasos seguir y desde qué rol, guardando la confidencialidad, respetando a las personas, no revelando información que pueda ser sensible; pero siendo solidarios en la observancia de sus personas, para entender que pueden haber algunos momentos en los que intervenir y, con ello, ponerle atención a algún comportamiento suicida que no estaban identificando. Es un aporte para derribar y atender un tema que sigue siendo tabú en la sociedad”
Ingrid Naranjo, vicepresidenta dcomité técnico nacional de factores psicosociales.